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Fernández Gasalla: “El ajuste económico necesita una retaguardia represiva”

No a los despidos en TELAM (María Paula Ávila foto)

No a los despidos en TELAM (María Paula Ávila foto)

Por Luciano Arias. Conversamos con Gabriel Fernández Gasalla, uno de los más destacados urbanistas argentinos, profesor de la Universidad Nacional de Quilmes, columnista de Infonews y presentador del programa radial Comunidad Imaginada por FM Ahijuna.

1. Ante un contexto social y económico cada vez más complicado, los multimedios Clarín, La Nación y América/Grupo Prisa parecen ser sus últimos socios políticos fiables ¿Cuáles son los intereses detrás de esta alianza? ¿Cree que estos medios se mantendrán fieles a Macri hasta las últimas consecuencias?

Las corporaciones mediáticas en Argentina tienen sus propios intereses económicos y lógicas de alianzas.
A diferencia de grupos mediáticos de otros países, las líneas editoriales no son tan firmemente ideológicas.
El mejor ejemplo es Clarín, que hace gala de una ubicuidad exitosa a la hora de posicionarse en gobiernos de distintas orientaciones ideológicas.
En consecuencia no creo en una fidelidad hasta las últimas consecuencias de un posible debacle de Macri.

2. ¿Cómo valora los despidos masivos en Télam?

Lamentablemente los predecesores le dejaron la mesa servida a Macri.
Inflaron la planta de Telam con contratos de periodistas afines (muchos de ellos incorporados a último momento) y eso le dio el argumento perfecto a la nueva gestión para cargarse una agencia de noticias que no obedece a intereses concentrados.

3. Se observa en Argentina una creciente militarización y judicialización de la vida pública.¿La derecha democrática ya no lo es tanto?

El viraje autoritario está asociado al viraje ideológico del propio gobierno de Cambiemos. En los primeros tramos de su gestión fue un gobierno conservador, de tono más pragmático, buscando pivotear sobre fines y medios.
Hoy asistimos a su faz neoliberal, con una agenda exclusivamente economicista, con objetivos puramente ajustadores.
Esa transición supone un salto de «calidad» (irónicamente) en sus métodos represivos.
Un ajuste económico supone una retaguardia represiva presta a ser usada cuando sea necesario. En estos tiempos no son solo palos y gases, la inteligencia cobra un rol central, anticipatorio, de ahí sistemas como el Pegasus.

4. Pese al incremento de la deuda pública y al retorno al FMI las cuentas siguen sin cerrar para el gobierno que prometió «El mejor equipo económico de los últimos 50 años». ¿Qué le resta esperar a los argentinos?

Es posible, y altamente probable que se repita una mega crisis como la de comienzo de siglo, con la salvedad que un corralito al estilo 2001 no sería de la misma naturaleza (los depósitos no están mayormente posicionados en dólares). Pero si, la situación social se agudiza y los escenarios post crisis terminales siempre son una fuente de potenciales negocios para sectores empresariales (mayormente transnacionalizados) que devaluación mediante pueden acceder a compras de títulos y bienes físicos a precios de remate.

5. Por último.¿Cómo ve el horizonte electoral del año próximo? ¿Quién tiene chances de hacerse con el poder? ¿Los peronistas perdonables, el campo nacional y popular, o CAMBIEMOS aún tiene chances de reeligir?

Aún no hay un candidato opositor con chances de ganar en un ballotage con posibilidades ciertas. Cristina Kirchner puede ser una ganadora en primera vuelta pero una probable perdedora en segunda. ¿Contra quién?
Contra un Macri que pueda sortear con cierto aire los meses venideros; o contra una figura de recambio dentro del oficialismo (Larreta o Vidal).
Las condiciones para la emergencia de un outsider están dadas. Pero un outsider «a la argentina» que provendría de la periferia del sistema político, aunque necesariamente representando a los intereses del campo popular.

Texto enviado por el autor Luciano Arias, para su publicación

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