Algo huele mal en Estados Unidos
Craig Roberts explica que estas agendas secretas han prevalecido durante tanto tiempo que actualmente el propio pueblo estadounidense está corrompido. "Como dice el refrán, el pescado empieza a pudrirse por la cabeza. La podredumbre en Washington ahora impregna el país", concluye el articulista.
Washington
Agendas secretas: «La podredumbre de Washington impregna todo EE.UU.»Los estadounidenses se han convertido en víctimas de las falsas agendas promovidas por su Gobierno en el extranjero, afirma el politólogo Paul Craig Roberts, que explica también los peligros que comporta la filosofía de la hegemonía. Contrainfo.com
Tercera Guerra Mundial:
El subsecretario de Defensa de EE.UU., Bob Work, advirtió al Ejército estadounidense para que se preparase para «una respuesta militar contra Rusia y China».
«No recuerdo ningún lugar […] en el que no hayamos respondido [militarmente]», indicó Work en un discurso ante el Consejo de Relaciones Exteriores.
«No me preocupa la Tercera Guerra Mundial», declaró.
«La mayor amenaza para el mundo es la insistencia de Washington en su hegemonía. La ideología de un puñado de neoconservadores es la base de esta insistencia. Nos enfrentamos a una situación en la que un puñado de psicópatas neoconservadores estadounidenses afirman determinar el destino de los países», escribe Craig Roberts en un artículo publicado por InfoWars. Recuerda que «las víctimas de los atentados de Washington son invariablemente civiles» y que «las muertes producen más reclutas para el Estado Islámico».
Acentúa que «ninguno de los ataques militares de Estados Unidos en otros países ha resultado en una mejor situación, como Vladímir Putin declara honestamente». «Las agendas secretas del Gobierno de Estados Unidos han tenido un alto coste para los estadounidenses y muchos pueblos del mundo. Los hermanos Foster iniciaron la Guerra Fría con sus agendas secretas y la histeria anticomunista. Agendas secretas empujaron a los estadounidenses a guerras largas, costosas e innecesarias en Vietnam y Oriente Medio.
Las agendas secretas de la CIA y de los militares que pretendían cambiar el régimen en Cuba fueron bloqueadas por John F. Kennedy y tuvieron como resultado el asesinato de un presidente que, a pesar de sus defectos, probablemente podría haber puesto fin a la Guerra Fría veinte años antes de que Ronald Reagan aprovechara la oportunidad», escribe el politólogo. Craig Roberts explica que estas agendas secretas han prevalecido durante tanto tiempo que actualmente el propio pueblo estadounidense está corrompido. «Como dice el refrán, el pescado empieza a pudrirse por la cabeza. La podredumbre en Washington ahora impregna el país», concluye el articulista.
Fuente: RT
